Clint Hickman, el recién elegido Presidente de la Junta de Supervisores del Condado de Maricopa, dice que el trabajo será hacer del Condado de Maricopa un lugar “donde dure la prosperidad y florezca la democracia”.
Durante la ceremonia anual de “paso del mazo”, Hickman dijo que su enfoque principal estará en el ciclo electoral 2020.
“Debido a nuestra asociación con la Oficina del Registrador, tendremos una supervisión bipartidista de las elecciones que no se han visto en el Condado de Maricopa en más de 50 años. Además, la Junta ha invertido millones de dólares para asegurarse de que tengamos el personal adecuado y el equipo actualizado para permitir que las personas tengan la experiencia de votación que desean y merecen”, dijo Hickman.
Un nuevo acuerdo de operaciones electorales entre la Junta de Supervisores y la Oficina del Registrador otorga a la Junta la responsabilidad de las actividades del día de las elecciones, como se describe en el estatuto estatal.
Anteriormente, la Junta había delegado sus deberes electorales al Registrador de acuerdo con una carta de 1955 y otro cambio este año es que ahora hay un puesto de nivel ejecutivo dentro del Departamento de Elecciones que informa directamente a la Junta.
“Cuando algo sucede, o hay puntos de decisión clave, la Junta debe saberlo, y nuestros residentes deben saberlo y así asegurarnos de que las personas sepan lo que estamos haciendo y por qué lo estamos haciendo”, dijo.
“Es de vital importancia para nuestra democracia, por lo que realizaremos más reuniones públicas y publicaremos planes detallados para el público, como lo hicimos recientemente con la primera vez Día de las elecciones y plan de votación de emergencia”, dijo Hickman.
Más allá de las elecciones, Hickman dijo que quiere aprovechar el impulso de años anteriores para crear un entorno donde las empresas puedan crecer y los residentes actuales y futuros puedan encontrar buenos empleos.
Enumeró entre los éxitos una moratoria sobre las reglas y regulaciones del gobierno; una serie de capacitación para comerciantes locales llamada “Vendor University”; y varios programas e iniciativas que brindan segundas oportunidades y conexiones laborales para individuos encarcelados.
“En total, hemos podido destinar aproximadamente un millón en fondos federales de la fuerza laboral a los esfuerzos de capacitación laboral aquí en el condado de Maricopa, que no solo ayuda a las personas involucradas en la justicia, sino que también ayuda a la comunidad”, explicó Hickman.