El Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE, por sus siglas en inglés) comenzó a pedir a los tribunales de inmigración que deporten a algunos beneficiarios del Acta Diferida Para Arribados en Infancia (DACA) en al menos tres estados, como Colorado, Texas y Arizona.
La administración Trump decidió eliminar el DACA y deportar a los amparados bajo el programa de la era Obama, como una prioridad, sin embargo cortes federales han bloqueado sus intentos y será la Corte Suprema, quien finalmente decida el destino de los llamados “soñadores” en los próximos meses.
En muchos casos, el gobierno cerró administrativamente los casos de los soñadores con cargos no penales, como violaciones de tráfico, para que pudieran obtener DACA, pero al reabrir sus casos, la elegibilidad de los soñadores para renovar el permiso estaría en peligro y abriría las puertas a su deportación.
“Se supone que los beneficiarios de DACA están protegidos, pero éste es un ataque real a la comunidad de soñadores, ya que se están reabriendo casos en las cortes de inmigración federales para jóvenes que ya estaban anteriormente en proceso de deportación”, opina el activista y abogado de inmigración, Yasser Sánchez.
Todo esto está sucediendo mientras la Corte Suprema está considerando el destino del programa DACA y algunos opositores aplauden el hecho de que ICE persiga a los “dreamers”.
“Es otro ejemplo de la falta de corazón de esta administración hacia personas las cuales no tienen otro hogar mas que este país”, agrega Sánchez.
Si la Corte Suprema falla a favor de la administración Trump, entonces ICE trabajará activamente para deportar a casi un millón de amparados por DACA a nivel nacional, enviando a la mesa de revisión todos y cada uno de los casos.
Para Emilia Bañuelos, defensora de los derechos humanos y abogada especialista en inmigración, un punto clave para los “soñadores” es mantenerse alejados de cualquier problema legal.
Y es que independiente de tener los beneficios de DACA, cualquier persona que sea arrestada o detenida por cualquier motivo, puede ser cuestionada por un agente de inmigración sobre su situación en el país, ya sea porque la cárcel trabaja con ICE o por que notifican que tienen alguien detenido cuya estancia es dudosa.
“Entonces, si la persona tiene DACA, el ICE le notifica que van a perder sus beneficios porque fueron detenidos por cualquier delito y los están mandando con el juez de inmigración poniéndolos inmediatamente en el proceso de deportación”, señala Bañuelos.
Pero incluso, si un soñador es arrestado por manejar bajo influjo (DUI) o violencia doméstica y salió de la cárcel sin enfrentar a un agente migratorio, el ICE les está mandando cartas terminado su protección de DACA.
“Nada de problemas a los beneficiarios de DACA y así no te afecta tu protección cuyo futuro depende de la decisión que tome la Corte Suprema antes de junio”, finaliza Bañuelos.