Una pelea familiar terminó con gente agarrándose a balazos con elementos de la Policía de Phoenix el martes ya por la noche.
Las autoridades informaron alrededor de las 9 p.m., los oficiales estaban respondiendo a una llamada al 911 donde se quejaban de una pelea familiar.
Cuando llegaron un hombre que vivía en la casa estaba actuando de manera errática y había salido de la casa con un arma.
Mientras los oficiales aún hablaban con la familia, escucharon disparos de un 7-Eleven cercano. En ese momento, los oficiales encontraron que un empleado había recibido un disparo.
El sospechoso se había escapado, pero los oficiales se le acercaron al sur de la tienda.
Ahí es donde la policía indicó que los oficiales dieron órdenes al hombre armado para que tirara su pistola. Sin embargo, se negó a obedecer y los oficiales dispararon contra el sospechoso.
En ese momento, el hombre dejó caer el arma y los oficiales además le tuvieron que aplicar descargas con sus “teasers”.
La policía de Phoenix confirmó que la víctima fue tratada en la escena y que el sospechoso fue llevado al hospital como medida de precaución, pero será encarcelado tan pronto como sea dado de alta.