Una de las características que definen a los Arizona Diamondbacks bajo la dirección de Lovullo ha sido su resiliencia. Foto: Cortesía / Facebook
Los Diamondbacks de Arizona pasaron la temporada viendo a un jugador tras otro lesionarse. Eran vendedores en la fecha límite de cambios, y las peticiones para el puesto del mánager Torey Lovullo han sonado durante meses.
Nota: al momento del cierre de edicion los Arizona Diamondbacks se encontraban a un juego de provocar un triple empate por el tercer boleto del comodin de la Liga Nacional junto con Rojos de Cincinnati y Mets de Nueva York, justo de iniciar serie de tres juegos ante Dodgers y cerrar temporada de visitantes contra Padres de San Diego.
Pero una de las características que definen a los Diamondbacks bajo la dirección de Lovullo ha sido su resiliencia. Lo demostraron durante su participación en la Serie Mundial hace dos años, al final de la temporada pasada que casi lo ganó, y se ha vuelto a poner de manifiesto este mes.
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“Teníamos todo el derecho a sentir lástima por nosotros mismos”, dijo Lovullo tras la victoria de Arizona por 9-2 sobre Filadelfia el domingo.
“Teníamos todo el derecho a decir: ‘¿Por qué nosotros? Asumámoslo como una experiencia de aprendizaje y vayamos aquí el año que viene’, pero ese vestuario no lo permitió”, agregó.
Los Diamondbacks tenían todas las razones para retirarse, ya que las lesiones diezmaron a su cuerpo de lanzadores y jugadores clave de posición se lesionaron. Siguieron adelante a pesar de todo, escalando posiciones en la clasificación con nuevos jugadores que llenaron los huecos dejados por las lesiones y los canjes.
Arizona tiene el tercer mejor récord de la Liga Nacional desde el 1 de agosto, con 28-19, pasando de ser un equipo sin opciones a aspirante a los playoffs.
La victoria del domingo sobre los Filis fue la sexta de los Diamondbacks en ocho juegos, colocándolos a un juego de Cincinnati y los Mets de Nueva York por el último puesto de comodín de la Liga Nacional de cara a la última semana de la temporada regular.
Arizona abre una serie de tres juegos en casa contra los actuales campeones de la Serie Mundial, los Dodgers de Los Ángeles, el martes, y cierra la temporada con tres juegos en San Diego.
“Solo nos enfocamos en nosotros mismos”, dijo el jardinero novato Jorge Barrosa después de conectar su primer jonrón en las Grandes Ligas contra los Filis.
El camino para llegar hasta aquí ha sido doloroso.
Arizona perdió a los lanzadores abridores Corbin Burnes, Jordan Montgomery y Tommy Henry por lesiones de codo que les pusieron fin a la temporada en junio. A.J. Puk, Justin Martínez, Blake Walston y Christian Montes de Oca también perdieron la temporada.
El receptor Gabriel Moreno, el jardinero Corbin Carroll y el jugador de cuadro Ildemaro Vargas estuvieron entre los jugadores de posición que perdieron tiempo de juego.
Con varios juegos por debajo de .500, los Diamondbacks se convirtieron en vendedores en la fecha límite de cambios a finales de julio, dejando ir a los lanzadores Merrill Kelly y Shelby Miller, al tercera base Eugenio Suárez, al primera base Josh Naylor y al jardinero Randal Grichuk.
Típicamente, una venta masiva de esa magnitud es una señal de alerta.
Los renovados Diamondbacks hicieron todo lo posible para no rendirse, incluso después de que el jardinero All-Star Lourdes Gurriel Jr. sufriera una rotura del ligamento cruzado anterior y el primera base Tyler Locklear sufriera lo que podría ser una lesión de codo que le dejara sin jugar la temporada.
El lanzador derecho Zac Gallen ha tenido un rendimiento excepcional en la recta final después de que los Diamondbacks decidieran retenerlo, con un récord de 6-2 desde el 2 de agosto. Ryne Nelson (7-3, 3.34 ERA) ha sido constante, al igual que Brandon Pfaadt (13-8, 5.02).
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Ketel Marte ha seguido jugando a un nivel de Estrella, el campocorto Geraldo Perdomo ha sido posiblemente el Jugador Más Valioso del equipo y Carroll se convirtió en el primer jugador con 30-30 en la historia de los Diamondbacks con 31 jonrones y 30 bases robadas.
“No fue una buena temporada aquí, ya sea por lesiones, estilo de juego o falta de juego. Pero siguen esforzándose, siguen creyendo y se concentran en el momento adecuado”, dijo Lovullo.
