MESA, Arizona — Un caso que ha conmocionado a la comunidad se registró el pasado viernes 11 de julio, cuando un joven padre fue detenido por presuntamente asesinar a golpes a su hija de tan solo cuatro semanas de nacida, mientras la madre trabajaba.
Los hechos ocurrieron alrededor de las 9:00 de la mañana en un complejo de apartamentos ubicado cerca de las calles Gilbert y University. La policía y los paramédicos respondieron a un reporte de que la bebé no respiraba. Al llegar, le brindaron atención médica y la trasladaron de urgencia a un hospital local.
JUST IN: A 22-year-old man is facing first-degree murder for the death of his four-week-old child in Mesa. Police say Jonathan Enriquez admitted to striking his child. https://t.co/7T1h2AteW1
— ABC15 Arizona (@abc15) August 7, 2025
Inicialmente, el padre identificado como Jonathan Enríquez, de 22 años, dijo a las autoridades que estaba cuidando a la niña y que, mientras le daba el biberón, esta comenzó a ahogarse. Sin embargo, en el hospital, los médicos detectaron señales claras de maltrato: heridas, lesiones en las piernas, costillas fracturadas y una lesión grave en el cráneo.
Pese a los esfuerzos médicos, la pequeña falleció debido a la gravedad de sus lesiones. Ante la evidencia, Enríquez confesó que golpeó a la bebé porque “no dejaba de llorar”. La policía lo detuvo de inmediato y ahora enfrenta cargos de asesinato en primer grado, abuso infantil y otros delitos relacionados. Un juez le fijó una fianza de un millón de dólares.
Este trágico caso ocurre apenas unos días después de un hecho similar en Arizona. El pasado lunes 8 de julio, Ronald Barney, de 19 años, fue arrestado acusado de asesinar a su hija recién nacida mientras jugaba videojuegos, molesto porque la bebé lloraba.
Las autoridades y defensores de los derechos de la infancia han condenado ambos casos, subrayando la urgencia de reforzar la concientización sobre la prevención del maltrato infantil y recordando que “los niños no se tocan”.
La policía de Mesa ha pedido a la comunidad que, ante cualquier sospecha de abuso o negligencia infantil, lo reporten de inmediato al 911 o a la línea directa de protección infantil de Arizona, disponible las 24 horas.