Foto: Arizona Cardinals/Facebook
Los Arizona Cardinals volvieron a sufrir un golpe doloroso en casa. Esta vez fue frente a los Seattle Seahawks, quienes se impusieron 23-20 el jueves por la noche con un gol de campo de 52 yardas de Jason Myers cuando expiraba el reloj. Fue la segunda derrota consecutiva de Arizona en los últimos segundos, tras caer días antes contra San Francisco con otro gol de campo en la última jugada.
Remontada que ilusionó, pero no alcanzó
🤩 IT'S MARV 🤩
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El partido parecía sentenciado cuando Seattle ganaba 20-6 a mitad del último cuarto. Sin embargo, Kyler Murray lideró una reacción que devolvió la esperanza al State Farm Stadium. Primero, conectó un pase de 16 yardas con Marvin Harrison Jr. para acercar a los Cardinals 20-13 con menos de seis minutos por jugar.
Más tarde, tras una falla de Myers en un intento de 53 yardas, Murray volvió a la carga y encontró a Emari Demercado en la zona de anotación para empatar 20-20 con apenas 33 segundos en el reloj.
El público local celebraba la posibilidad de ir a tiempo extra, pero un error en la patada de salida dio buena posición de campo a Seattle. Bastaron un pase de Sam Darnold a Jaxon Smith-Njigba y dos jugadas más para que Myers, esta vez sin titubear, firmara la victoria visitante.
Los números de Arizona
MARVIN HARRISON JR. CLEARLY DOES NOT KNOW THE #CARDINALS PLAYBOOK.
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Every week Harrison appears to be running the wrong route and Kyler Murray is throwing the ball in different places.
Plays like this from Harrison are costing Arizona wins. Just awful.
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Murray completó 27 de 41 envíos para 200 yardas, con dos touchdowns y dos intercepciones. La conexión con Harrison Jr. fue clave en el cierre, aunque el novato también tuvo un inicio complicado con un balón suelto que derivó en intercepción.
La ofensiva volvió a mostrar chispazos tardíos, pero durante gran parte del juego batalló para mover el balón. El equipo fue capturado seis veces por la defensa de Seattle, reflejando los problemas en la protección de la línea ofensiva.
Un patrón que preocupa
De acuerdo con Sportradar, es la primera vez desde al menos 1988 que los Cardinals pierden dos partidos seguidos con goles de campo en la última jugada del tiempo regular. El entrenador Jonathan Gannon reconoció la entrega de sus jugadores, pero también señaló que no es suficiente:
“Aprecio la resiliencia, está ahí. Nadie tiene la cabeza abajo, todos creen que podemos ganar. Pero no estamos haciendo lo necesario, en las tres fases, para concretar esas victorias”.
Con marca de 2-2, Arizona ha dejado escapar dos oportunidades importantes en el cierre, lo que podría pesar más adelante en la pelea dentro de la División Oeste de la Conferencia Nacional.
Lo que viene
Los Cardinals regresan a la acción el domingo 5 de octubre, cuando reciban a los Tennessee Titans en el State Farm Stadium. El equipo buscará romper la mala racha y recuperar la confianza frente a su afición.