La historia de la última entrega de El Conjuro retoma uno de los archivos más inquietantes investigados por la pareja: el caso de la familia Smurl. Foto: Cortesía /
La saga de terror más popular de la última década llega a su fin con El Conjuro 4: Últimos Ritos, dirigida por Michael Chaves y producida por James Wan y Peter Safran; esta película marca la despedida definitiva de Ed y Lorraine Warren de la gran pantalla.
La cinta tendrá una duración de 135 minutos, convirtiéndose en la entrega más larga del universo de El Conjuro, pues por más de dos horas en las que los espectadores serán testigos de un desenlace que promete ser el más oscuro y perturbador de todos los tiempos.
La historia retoma uno de los archivos más inquietantes investigados por la pareja: el caso de la familia Smurl, ocurrido en Pensilvania a finales de los años 70 y principios de los 80. Los Smurl afirmaban vivir un infierno dentro de su hogar: ruidos extraños, olores insoportables, sombras que acechaban en los pasillos y hasta ataques físicos, incluyendo agresiones sexuales atribuidas a un súcubo demoníaco.
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Tras sus investigaciones, los Warren concluyeron que en la casa habitaban cuatro entidades: tres espíritus humanos y un demonio que dominaba a las demás almas y pese a múltiples intentos de exorcismo, los fenómenos continuaron hasta que la familia decidió mudarse.
Pero lo más perturbador de esta nueva entrega es que revela la identidad real de ese demonio, una presencia que los Warren ya habían enfrentado en el pasado, un enemigo personal que los persiguió toda su vida… y que ahora regresa para cerrar su historia.
De acuerdo a los Warren estos hechos están inspirados en casos reales, pese a esto ¿Qué sucede cuando la realidad supera a la ficción?. En julio de 2025, el investigador paranormal Dan Rivera, custodio oficial de la muñeca más famosa del cine de terror, Annabelle, murió repentinamente durante una gira por Estados Unidos en la que la exhibía en distintas ciudades.
Las autoridades señalaron causas naturales, pero para muchos esto revivió la leyenda de la maldición de Annabelle.
Poco después, en agosto del mismo año, se confirmó que el comediante Matt Rife adquirió la casa y el Museo Oculto de los Warren, haciéndose cargo de más de 750 objetos vinculados a casos paranormales, incluida la propia Annabelle.
Su plan es abrir el museo al público e incluso permitir estadías nocturnas, una decisión que ya genera morbo y temor entre los seguidores del caso.
Entre los objetos más inquietantes que se exhiben destacan el Espejo de Myrtles, donde supuestamente se reflejan los rostros de los muertos; la Silla del Diablo, que condenaba a la desgracia a quienes se sentaban en ella; el Arca Satánica, un cofre cubierto de símbolos de invocación; el Ídolo de Satán; una tumba de vampiro traída desde Europa y sobre todo, una caja prohibida que Lorraine Warren calificó como el objeto más peligroso de toda la colección y según sus propias palabras, ni siquiera un sacerdote podría ayudar a quien se atreviera a abrirla.
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Por último, El Conjuro 4: Últimos Ritos contará nuevamente con la participación de Patrick Wilson y Vera Farmiga en los papeles de Ed y Lorraine Warren, junto a Elliot Cowan y Rebecca Calder como Jack y Janet Smurl.
También habrá apariciones especiales de Judy Warren y, por supuesto… de Annabelle.
Así, tras diez años de terror, el universo de El Conjuro llega a su conclusión más espeluznante, con una última batalla contra la oscuridad que marcará el destino de los Warren… y quizás el de todos nosotros.
