Los criminales se hacen pasar por proveedores de seguros médicos estadounidenses por lo que el FBI advierte a la comunidad de no caer en ellas. CORTESIA: Freepik
El Buró Federal de Investigaciones (FBI, por sus siglas en inglés) alerta a la población sobre un sofisticado esquema de fraude financiero que tiene como objetivo específico a personas de habla china que residen en Estados Unidos.
En este elaborado engaño, los criminales se hacen pasar por proveedores de seguros médicos estadounidenses y por autoridades policiales de China para extorsionar a sus víctimas, generando gran alarma en la comunidad.
El modus operandi inicia con una llamada en chino, que suplanta el número legítimo de un departamento de reclamaciones de seguros médicos; el estafador interroga a la víctima sobre recientes procedimientos quirúrgicos que nunca ocurrieron, mostrando facturas fraudulentas a través de software de video .
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Si la persona niega haber solicitado dicho procedimiento, la llamada es transferida a un cómplice que se hace pasar por un oficial de la ley chino y este nuevo impostor amenaza a la víctima con la extradición o un proceso judicial en el extranjero, exigiendo un pago sustancial para la fianza y solicitando información personal confidencial.
Para incrementar la presión y el miedo, el falso agente puede instruir a la víctima para que descargue software de comunicación de video, manteniendo una supuesta vigilancia las 24 horas del día con el fin de aislarla y evitar que busque ayuda.
Para protegerse de esta estafa, el FBI recomienda verificar de forma independiente los registros de reclamaciones del seguro médico, accediendo directamente al sitio web oficial o llamando al servicio al cliente.
Es crucial no compartir información personal, como credenciales de acceso a los portales de seguros, con ninguna persona que llame de manera no solicitada; además, se debe rechazar cualquier petición de transferir dinero o de permitir que un desconocido tome control remoto del computador personal.
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Si usted o alguien que conoce ha sido víctima de este fraude, debe presentar una queja formal en el Centro de Quejas sobre Crímenes por Internet (IC3), en la dirección www.ic3.gov .
El reporte debe incluir toda la información disponible, como correos electrónicos, números de teléfono, nombres de empresas y dominios utilizados por los estafadores; también es vital aportar los datos de las transacciones o cuentas bancarias involucradas, incluso si no hubo una pérdida financiera, junto con los detalles precisos de la interacción con los delincuentes.
El IC3, gestionado por el FBI, analiza estas denuncias para perseguir estos crímenes y proteger a la comunidad, aunque no garantiza una respuesta individual a cada reporte.
