El congresista Rubén Gallego consideró que el expresidente Donald Trump no está por encima de la ley y debe enfrentar la justicia e ir a la cárcel por haber sustraído documentos clasificados de la Casa Blanca y considera que su intento por anular las elecciones del 2020 enviando una turba enardecida a que asaltara el Capitolio y provocando una insurrección debe ser considerado traición a la Patria.
Gallego fue entrevistado el pasado fin de semana, tras reunirse con sus representados e informarles sobre varios tópicos, uno de ellos fue precisamente la controversia de la operación del FBI en Florida para recuperar la documentación clasificada que poseía Donald Trump sirvió para requisar informes muy sensibles.
Gallego explicó que Trump afronta delitos muy graves, pues entre las cajas encontradas por los agentes federales había hasta 11 carpetas de información clasificada y numerosos ficheros marcados con el logotipo de “top secret”, el nivel de seguridad más alto en Estados Unidos.
“Esperamos que se lleve a cabo una investigación seria y si se cometieron delitos se levanten cargos y sea llevado ante la justicia y muy probablemente la cárcel”, dijo Gallego, al recordar que el hecho de quedarse con cualquier documento confidencial del gobierno es considerado delito y varias personas han sido condenadas por ello.
Las circunstancias que son las que fundamentan la orden de registro de Mar-a-Lago de la agencia federal, llevan a una investigación a Trump por obstrucción a la Justicia y una posible violación de la Ley de Espionaje.
El contenido de esa documentación es la que habría motivado una investigación inédita por parte del FBI contra un expresidente, que está siendo investigado por haber violado la Ley de Espionaje.
A estos posibles delitos se sumaría la obstrucción a la Justicia y la eliminación y destrucción de archivos, una serie de irregularidades que pueden implicar condenas a multas millonarias o el ingreso en prisión.
Estos documentos señalan que los investigadores consideran una grave amenaza para la seguridad nacional que Trump se hubiera llevado toda esa documentación y el temor a que su contenido pudiera ser difundido es lo que provocó que el fiscal general, Merrick Garland, aprobara algo tan inédito como el registro de una propiedad de un expresidente del país.
Los delitos por lo que investigan al expresidente pueden tener distintas consecuencias. Para empezar, tanto él como cualquiera que le haya ayudado a llevarse y a ocultar los documentos pueden haber quebrantado las leyes federales. El delito más grave sería el de vender secretos de Estado a un gobierno extranjero. Aunque los precedentes corresponden a violaciones mucho menores de la Ley de Espionaje, como la ha ocurrido a varios funcionarios declarados culpables por poseer documentos a los que no se debería tener acceso.
A lo anterior hay que sumar la acusación de que puede haber escondido o destruido documentos oficiales. Unos hechos que están castigados con más de tres años de cárcel y la prohibición de acceder a cargos públicos, pero para que esto ocurra, los investigadores deberán demostrar que el expresidente sabía que al llevarse las cajas de información clasificada estaba haciendo algo contrario a la ley.
Estas graves acusaciones contra Trump, pueden costarle su nueva candidatura a las elecciones de 2024, pero aunque las leyes correspondientes establecen que el responsable de un delito así “perderá su cargo y será inhabilitado para ocupar cualquier cargo en Estados Unidos”, la Constitución no especifica que esto sea una limitación para ser presidente.
Otro tema que sigue candente son las investigaciones judiciales y las audiencias sobre la ingerencia de Trump en el violento ataque al Capitolio con la intención de detener a la oficialización del Congreso y el ex vicepresidente Mike Pence, de la victoria de Joe Biden, que causó al menos 7 muertes.
Rubén Gallego estuvo presente ese día y en su calidad de veterano, se dio a la tarea poner a salvo de los golpistas y ha condenado a los miles de fanáticos de Trump que irrumpieron en el Capitolio.
“El haber enviado una turba enardecida de seguidores a intentar detener un proceso de oficialización de un resultado electoral, es un ataque directo a nuestra democracia y debe ser considerado como una traición”, consideró el congresista.
Las recientes audiencias que se reanudan este mes y en donde se ha entrevistado a cientos de personas y algunos y funcionarios de alto perfil de la administración Trump, han arrojado luz sobre los intentos del expresidente por anular el resultado de la elección 2020 y mantenerse en el poder y además su negativa a frenar el intento golpista, además de provocar la insurrección.
