Suprema Corte rechaza apelación apache: seguirá proyecto de mina de cobre en Oak Flat
Foto: Carlos Torres Bujanda
Phoenix, AZ – La Suprema Corte de Estados Unidos rechazó este martes la apelación presentada por representantes de comunidades apaches que buscaban detener la transferencia de tierras federales en Oak Flat, Arizona, para un proyecto de minería de cobre impulsado por Resolution Copper.
Con esta decisión, se mantiene en pie la transferencia de 3.75 millas cuadradas del Bosque Nacional Tonto a la empresa minera, que planea explotar lo que describen como el segundo depósito de cobre más grande del mundo. Solo los jueces Neil Gorsuch y Clarence Thomas disintieron, calificando la negativa como “un grave error”.
“El gobierno ha protegido históricamente el acceso de los apaches a Oak Flat. Ya no. Ahora quieren convertirlo en un agujero enorme en la tierra”, escribió Gorsuch.
Un lugar sagrado para los apaches
BIG NEWS! The U.S. Forest Service has withdrawn the final environmental impact statement – temporarily halting the Oak Flat land swap!!! @indianz #SaveOakFlat https://t.co/Hgj5wBEjef
— Defend Oak Flat (@DefendOakFlat) March 2, 2021
Oak Flat es considerado un sitio sagrado por los pueblos apaches, en especial por la organización Apache Stronghold, que presentó la demanda. Según su líder, Wendsler Nosie Sr., “nada nos detendrá en la defensa de este sitio”. También pidió al Congreso actuar para proteger el lugar.
El terreno está cubierto de encinos ancestrales y plantas medicinales tradicionales. Para los apaches, es esencial en su práctica espiritual y bienestar cultural.
Una mina polémica, pero con respaldo local
El proyecto minero cuenta con respaldo en pueblos mineros tradicionales como Superior, Arizona. Resolution Copper, una subsidiaria de las multinacionales Rio Tinto y BHP, estima que el yacimiento generará $1,000 millones al año para la economía del estado y miles de empleos.
Victoria Peacey, gerente de Resolution Copper, aseguró que han modificado el plan de extracción para reducir el impacto sobre las tribus. Sin embargo, grupos indígenas y ambientales advierten que el daño será irreversible.
Implicaciones legales y políticas
El proyecto fue aprobado por el Congreso en 2014, pero se ha detenido en múltiples ocasiones. Durante el mandato de Donald Trump se impulsó la transferencia, mientras que la administración Biden intentó frenar el proceso para revaluarlo. Pese a ello, los tribunales permitieron su avance, argumentando que no se violan derechos religiosos ni tratados históricos.
Cabe destacar que el juez Samuel Alito no participó en la decisión por tener acciones en BHP, una de las empresas involucradas.
La decisión judicial ha provocado indignación entre defensores de derechos indígenas, quienes continúan sus esfuerzos legales y legislativos para preservar Oak Flat.