Donald Trump inició su alocución con la frase recurrente “heredé un desastre”, culpando a su predecesor de los problemas actuales. CORTESIA: The White House
En un discurso dirigido a la nación, el presidente Donald Trump pintó un panorama de revitalización nacional; sin embargo, muchas de sus afirmaciones entran en conflicto con datos oficiales y sobre todo con la percepción pública.
El mandatario, que enfrenta los índices de aprobación más bajos en la historia, aseguró que la inflación está controlada y prometió un “auge económico”; no obstante, los votantes expresan preocupación por el costo de vida.
Este análisis contrasta las declaraciones del presidente con información estadística y opiniones expertas, ofreciendo una visión integral del estado de la nación.
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Trump inició su alocución con la frase recurrente “heredé un desastre”, culpando a su predecesor de los problemas actuales.
La intervención, de 18 minutos, careció de anuncios políticos nuevos y se centró en la autocomplacencia; analistas resaltaron su tono combativo y similar a un mitin, lo que generó críticas por su falta de sustancia en un momento crucial; su popularidad se sitúa incluso por debajo 39% según algunos sondeos.
Miembros del Partido Demócrata calificaron el discurso como delirante y egocéntrico, mientras que la expectativa pública giraba en torno a temas de asequibilidad y política exterior.
Inmigración: Retórica Inflamatoria
El presidente dedicó parte significativa de su discurso a la inmigración, usando una retórica alarmista.
Afirmó que 25 millones de migrantes entraron bajo la administración Biden, etiquetándolo como una “invasión”; los datos de la Patrulla Fronteriza contradicen esto, registrando menos de 11 millones de encuentros.
También culpó a los inmigrantes de la crisis de vivienda y costos sanitarios, a pesar de estudios que muestran su contribución económica neta positiva.
Sus comentarios sobre la comunidad somalí en Minnesota, a los que tildó de “basura”, fueron ampliamente condenados como racistas.
La Economía: Una Imagen Dividida
Trump declaró: “más estadounidenses están trabajando hoy que en cualquier momento de nuestra historia”; si bien es cierto en números brutos, se debe al crecimiento poblacional.
La tasa de desempleo, en cambio, aumentó al 4.6% en noviembre, su nivel más alto en cuatro años y el mercado laboral muestra signos de debilitamiento, con pérdidas netas de empleo en varios meses recientes.
La economista Heather Long describió la situación como una “recesión de empleo”, señalando que la creación de puestos se concentra casi exclusivamente en el sector salud.
Expertos ofrecen análisis matizados sobre la trayectoria económica. Mientras algunos ven nubes de tormenta, otros, como JP Morgan, anticipan una “reaceleración gradual”; argumentan que el mercado laboral se ajustó pero no colapsó, y que la inversión en inteligencia artificial actúa como un motor secundario.
La Reserva Federal ha recortado las tasas de interés para apoyar la actividad, aunque sus efectos tardarán en materializarse. El futuro inmediato estará marcado por la evolución de la inflación y la respuesta del mercado laboral a políticas monetarias más flexibles.
¿Realmente Detuvo la Inflación?
Una de las afirmaciones centrales fue haber “detenido” la inflación. No obstante, el Índice de Precios al Consumidor (IPC) anual fue del 2.7% en noviembre, lejos de estar detenido y por encima del objetivo de la Reserva Federal; es cierto que bajó desde su pico del 9.1% en 2022.
Trump dijo que “todo lo demás está cayendo rápidamente”, pero las encuestas muestran que los ciudadanos notan precios altos en alimentos y servicios.
El propio discurso omitió mencionar los precios de la energía y los comestibles, presiones clave para los hogares.
El discurso contuvo varias declaraciones cuantificables que requieren contraste. Trump proclamó haber asegurado “18 billones de dólares en inversión”, pero el sitio web de la Casa Blanca solo registra 9.6 billones en anuncios, no en flujos reales.
Dijo que la gasolina bajó a “1.99 dólares por galón en tres o cuatro estados”, mientras que el promedio nacional era de 2.94 dólares.
Sobre su victoria electoral, la calificó de “arrolladora”, aunque obtuvo menos votos electorales que otros presidentes en victorias consideradas así.
Lo que el Discurso Omitió
Los observadores notaron significativas omisiones estratégicas. No hubo mención a la creciente tensión con Venezuela, a pesar del reciente bloqueo naval anunciado por su administración.
Tampoco abordó la guerra en Ucrania o las relaciones con China y Rusia.
La congresista Alexandria Ocasio-Cortez sugirió que el discurso podría ser una táctica de distracción, ante la inminente liberación de archivos relacionados con el caso Epstein este viernes.
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La respuesta política fue inmediata y polarizada y el presidente del Comité Nacional Demócrata, Ken Martin, emitió un comunicado mordaz, acusando a Trump de “perder la economía” y de proteger a los ultra ricos.
