El entrenador de los Arizona Cardinals, Jonathan Gannon, enfrenta un año crucial en la NFL. Foto: Cortesía / Arizona Cardinals
La temporada 2025/26 de la NFL no ha comenzado, pero en el desierto de Arizona las expectativas son tan altas como las temperaturas. Y en el centro de la atención está el entrenador en jefe de los Arizona Cardinals, Jonathan Gannon, quien afronta su tercer año al mando del equipo bajo una creciente presión.
Con un balance de 12 victorias y 22 derrotas en sus dos primeras campañas, Gannon ha sido incluido en la lista de los entrenadores que más tienen que demostrar esta temporada, según un análisis de Pro Football Focus (PFF). El técnico defensivo, que llegó en 2023 con la misión de cambiar el rumbo de la franquicia, sabe que el margen de error se ha reducido.
A pesar de su perfil como estratega defensivo, los Arizona Cardinals no han logrado consolidarse en ese aspecto. Durante las dos temporadas de Gannon, Arizona ha ocupado los puestos 32º y 27º en EPA defensivo por jugada, una de las métricas más relevantes para evaluar el rendimiento en esa faceta.
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Por si fuera poco, persiste la incertidumbre sobre el futuro a largo plazo del mariscal de campo Kyler Murray. Aunque Murray ha mostrado destellos de calidad —su calificación general PFF fue de 82.1— su irregularidad sigue alimentando dudas.
Para 2025, Gannon ya no podrá escudarse en la falta de talento. Los Cardinals han invertido significativamente en reforzar la defensa, a través del draft y la agencia libre.
Entre las incorporaciones destacan el ala defensiva Josh Sweat, el veterano liniero Calais Campbell, el tackle defensivo Walter Nolen y el esquinero Will Johnson. Además, casi todas las selecciones del draft 2025 se enfocaron en reforzar la defensa.
“El equipo va a estar liderado por la defensa”, aseguró el profundo Jalen Thompson. “El año pasado estuvimos en muchos partidos y si hubiéramos tenido un poco más, podríamos haber ganado más juegos. Este año debería ser diferente”.
Además de los refuerzos, los Cardinals esperan un salto de calidad por parte de sus jóvenes talentos. Jugadores como el tackle defensivo Darius Robinson —primera ronda de 2024— y las armas ofensivas Marvin Harrison Jr. y Trey Benson, entrarán en su segundo año con altas expectativas.
“Cada uno está en una etapa diferente, pero la continuidad en las tres fases es clave”, dijo Gannon en una reciente entrevista. “Cuando llegue la oportunidad, deben aprovecharla. Tenemos chicos que están listos para dar ese salto”.
Aunque en 2024 el equipo mejoró respecto a la temporada anterior, alcanzando ocho victorias, un nuevo año con récord negativo podría poner en riesgo la continuidad de Gannon.
El contexto también ha cambiado. Tras un mercado de agencia libre exitoso y un sólido draft, la directiva y la afición esperan ver a un equipo más competitivo. Los días de justificar las derrotas por la falta de profundidad en el plantel han quedado atrás.
Gannon ha sido claro: “El tiempo de aprender ya pasó. Ahora es momento de ejecutar y ganar partidos”.
¿Qué se espera en 2025?
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Con el calendario por delante y una NFC que presenta oportunidades, los Cardinals no pueden permitirse seguir siendo un equipo del montón. La inversión en defensa y el desarrollo de sus jóvenes estrellas apuntan a que esta podría ser la temporada donde Arizona vuelva a pelear por los playoffs.
Sin embargo, todo dependerá de que Gannon logre sacar el máximo provecho de un grupo que, sobre el papel, está más capacitado que nunca.
