El Director del FBI, Kash Patel, defiende el manejo del Caso Epstein en la administración de Donald Trump; senadores expresan dudas. Foto: Cortesía / @TuckerCNews
En una tensa audiencia ante el Senado, el director del FBI, Kash Patel, enfrentó críticas de legisladores demócratas por el manejo de la investigación de Jeffrey Epstein, insistiendo que no hay “información creíble” que sugiera que el financiero traficaba víctimas a otras personas.
Al ser presionado por el senador John Kennedy sobre el supuesto encubrimiento en el caso, Patel afirmó con firmeza que si existiera evidencia de tales crímenes, la agencia ya habría presentado un caso. “No tenemos ninguna información creíble, señor. Si la tuviéramos, créame, habríamos presentado el caso”, declaró Patel.
La audiencia se tornó particularmente acalorada cuando el senador demócrata Adam Schiff acusó a Patel de alinear la agencia con la agenda política del presidente. Patel defendió la postura del FBI, argumentando que la agencia no retiene información creíble y que las investigaciones que carecen de mérito no se hacen públicas.
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Patel también señaló que las administraciones anteriores, incluyendo las de Obama y Biden, tuvieron la oportunidad de liberar documentos sellados relacionados con el caso y no lo hicieron. “Las administraciones anteriores tuvieron la oportunidad de hacerlo. No lo hicieron”, dijo Patel, refiriéndose a los documentos que los senadores buscaban.
A pesar del intenso interrogatorio, Patel se mantuvo firme en su posición, sosteniendo que él no está al tanto de la información que los senadores demócratas alegan que existe y que su agencia no está involucrada en ningún tipo de encubrimiento.
La falta de información sobre los clientes de Epstein ha sido una fuente de frustración para muchos legisladores y para el público en general. La negativa de Patel a confirmar la existencia de información adicional creíble ha generado aún más escepticismo entre algunos miembros del comité. La audiencia concluyó sin una resolución clara, dejando el debate sobre la transparencia en el caso Epstein en un punto muerto.
A pesar de las declaraciones de Kash Patel, la relación de Donald Trump con Jeffrey Epstein ha sido objeto de intenso escrutinio público durante años, especialmente debido a su amistad en los círculos sociales de la élite de Florida y Nueva York en las décadas de 1990 y 2000.
Ambos se movían en los mismos círculos, y hay varias fotos y videos que los muestran juntos en eventos y fiestas en propiedades de Trump, como su club Mar-a-Lago. Esta amistad se ha documentado ampliamente a través de reportes de prensa.
La relación entre los dos se tensó y finalmente se rompió a mediados de la década de 2000. Aunque las razones exactas varían según la versión, se ha reportado que el distanciamiento se debió a un conflicto por una propiedad en Palm Beach o a que Epstein supuestamente se “robó” a empleadas del spa de Mar-a-Lago.
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Después de la ruptura, Trump afirmó en varias ocasiones que no había hablado con Epstein en muchos años. A pesar de esto, la historia de su relación ha seguido siendo un punto de interés y controversia, especialmente después de que el caso de Epstein volvió a ser noticia en 2019.
El papel de Trump en el caso se intensificó con su promesa de campaña de desclasificar todos los documentos relacionados con Epstein. Esta promesa, sin embargo, ha sido criticada por los opositores que señalan la falta de transparencia del gobierno. Las declaraciones de Kash Patel, quien fue nombrado por el actual presidente para dirigir el FBI, han añadido más combustible al debate.
