La Reserva Federal de Estados Unidos anunció este miércoles un recorte en las tasas de interés en un cuarto de punto porcentual, marcando la tercera reducción en los últimos meses tras un periodo prolongado de alzas destinadas a controlar la inflación.
El nuevo rango para la tasa de interés de referencia, conocido como tasa de fondos federales, se sitúa ahora entre 4.25 % y 4.5 %. Esta tasa determina el costo del crédito interbancario nocturno y tiene un impacto directo en los costos de financiamiento para los consumidores, como hipotecas, préstamos automotrices y tarjetas de crédito.
En 2022 y 2023, la Fed incrementó la tasa de interés en 11 ocasiones para combatir la inflación descontrolada que afectó a Estados Unidos y otros países tras la pandemia de COVID-19. Sin embargo, con la desaceleración del aumento de precios, el banco central optó por revertir gradualmente esa tendencia, con reducciones en septiembre, noviembre y ahora en diciembre.
Lee también: Sociedad civil se organiza para hacer frente a Donald Trump y a la Prop. 314 en Arizona
A pesar de las reducciones en las tasas, la inflación mostró un leve repunte en noviembre. Los precios al consumidor subieron un 2.7 % en comparación con el año anterior, ligeramente por encima del 2.6 % registrado en octubre. En términos mensuales, los precios aumentaron un 0.3 % de octubre a noviembre, el incremento más significativo desde abril.
El aumento en los costos de bienes como autos usados, seguros de vehículos y servicios de hotelería impulsó este repunte. No obstante, la inflación permanece considerablemente por debajo de su pico de hace dos años, cuando alcanzó niveles históricos.
Impacto en la Economía
La decisión de la Fed de reducir las tasas refleja un equilibrio entre el control de la inflación y el estímulo al crecimiento económico. Una disminución en las tasas de interés reduce los costos de endeudamiento para las empresas y los consumidores, lo que puede incentivar el gasto y la inversión.
La modesta alza en la inflación no fue suficiente para disuadir a la Fed de implementar esta medida ampliamente anticipada. Economistas y analistas de Wall Street esperan que esta reducción ayude a consolidar una recuperación económica sostenible mientras se mantienen vigilantes ante posibles presiones inflacionarias en 2025.
Con este cambio de dirección, la Reserva Federal reafirma su compromiso de ajustar su política monetaria según las necesidades de la economía, equilibrando cuidadosamente el crecimiento económico y la estabilidad de precios.