El líder demócrata de la Cámara de Representantes, Reginald Bolding, acogió con beneplácito el anuncio de hoy de que el Departamento de Justicia de los Estados Unidos está demandando a Arizona por el Proyecto de Ley de la Cámara de Representantes 2492 que, antes de que se aprobara a principios de este año, los demócratas y los abogados legislativos no partidistas advirtieron que era una restricción inconstitucional del derecho al voto.
Las protecciones para evitar que los no ciudadanos voten en Arizona ya son sólidas y funcionan, alimentados por mentiras sobre las elecciones de 2020, los republicanos agregaron onerosos requisitos documentales nuevos e innecesarios para usar un formulario federal de registro de votantes.
La propuesta HB2492 significaba que Arizona ya no aceptaría únicamente documentos comunes en comunidades indígenas y de bajos ingresos, como una identificación tribal, certificados de nacimiento, pasaportes o documentos de naturalización sin documentación adicional.
La fiscal general adjunta, Kristen Clarke, calificó la HB2492 como “una violación de libro de texto” de la Ley Nacional de Registro de Votantes y la Ley de Derechos Civiles de 1965.
“Arizona tiene una historia fea de privar a los votantes indígenas y otros votantes de color. Le advertimos al gobernador que estaba escribiendo un nuevo y triste capítulo en esa historia al aceptar la Gran Mentira y firmar este proyecto de ley”, dijo el líder demócrata de la Cámara de Representantes, Reginald Bolding.
“Ahora damos la bienvenida a la intervención del DOJ porque estaba claro que este proyecto de ley era inconstitucional y tenía como objetivo suprimir el voto de comunidades particulares. Esto tiene que terminar”, agregó Bolding.
“Demasiados políticos en Arizona han estado ansiosos por aceptar y difundir información errónea sobre las elecciones de 2020, incluso si sus sus propios abogados les dicen que sus medidas de supresión de votantes son claramente inconstitucionales”, finalizó.
