Con bombos y platillos, la agencia de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP) de los Estados Unidos anunció el decomiso de 270 vejigas de totoaba en la garita Mariposa, de Nogales; el cargamento, descrito como “el segundo más grande” de su tipo registrado en Arizona y el país, tuvo lugar el pasado 13 de abril, pesaba 242 libras y tenía un valor en el mercado negro de 2.7 millones de dólares.
Sin embargo, el vocero local de la dependencia en Tucson, Robert G. Daniels ni el representante nacional en Washington, John B. Mennell, contestaron algunas preguntas tan sencillas como cruciales formuladas por PRENSA ARIZONA, sobre detalles durante y posteriores al aseguramiento del contrabando.
No supieron responder cuándo, qué cantidad de vejigas, peso ni valor del aseguramiento más grande registrado anteriormente; tampoco supieron decir si hubo algún arresto en ese primer caso.
Sobre los pormenores del decomiso del pasado 13 de abril, marcadamente descrito por la propia agencia como “el segundo más grande”, los representantes ante los medios de CBP tampoco revelaron la identidad del que transportaba el cargamento ilegal, de dónde venía, a dónde se dirigía, qué tipo de vehículo comercial manejaba (trailer, pick up, etc.), por qué lo dejaron ir o si le retiraron el permiso comercial para ingresar mercancías a los Estados Unidos.
De acuerdo a la CBP, “el pez totoaba ha sido catalogado como una especie en peligro de extinción bajo la Ley de Especies en Peligro de Extinción de Estados Unidos desde 1979. Las vejigas natatorias de esta especie y otras especies similares en todo el mundo son apreciadas en la Medicina Tradicional China y como un manjar cultural asiático. Debido a que la especie está protegida por el gobierno federal, tanto en los Estados Unidos como en México, es ilegal tomar, poseer, transportar o vender Totoaba. Además, los métodos de pesca con redes de enmalle utilizados para capturar la totoaba han resultado en la muerte conjunta de otra especie en peligro de extinción en el Golfo de California, como la vaquita marina.
Con evasivas
El boletín informativo sobre la millonaria e histórica incautación, emitido por la CBP a nivel nacional el lunes 12 de junio, tiene un largo título de 2 líneas que dice: “Segunda incautación más grande de vejigas natatorias de totoaba por parte de oficiales de CBP de Arizona”.
Pero tras su revisión encontramos que es vago, confuso y con muchos vacíos informativos, pues omite detalles que son clave para los medios de comunicación, nuestros lectores, la audiencias y el público en general.
Para preguntas, la dependencia pide a los medios dirigirse a sus representantes de prensa en Tucson, Robert G. Daniels y en Washington John B. Mennell.
El vocero en Tucson no contestó a ninguna de nuestras preguntas y tajante dijo: “Estaré fuera de la oficina, puede contactar a John Mennell”.
Por su parte, el portavoz nacional Mennell pidió por escrito nuestras preguntas, algunas descritas anteriormente y estas fueron sus respuestas: “El conductor fue devuelto a México, la CBP incautó el vehículo y USFWS retuvo las vejigas”; se refiere a la también agencia federal Servicio de Pesca y Vida Silvestre de los Estados Unidos, la cual solo mencionan escuetamente en el comunicado, que no fue emitido de conjuntamente con dicha dependencia.
Sobre el descubrimiento del cargamento, explicó que supuestamente era de pescado, pero “la revisión electrónica detectó irregularidades y lo envió para una inspección intensiva. Las vejigas estaban ocultas dentro de filetes de pescado fresco.
A la solicitud de estadísticas de decomisos de totoaba en los últimos años en la frontera, su respuesta fue: “No hay números específicos disponibles en este momento.
Sobre el modus operandi de los traficantes de totoaba dijo el vocero nacional de CBP: “En la mayoría de los casos, se manifiesta mal (huele mal) o se oculta dentro de las importaciones legítimas de productos del mar, tanto en tanto en transporte particular como comercial.
¿Qué mensaje de advertencia tiene CBP para quienes participan en esto? se preguntó al entrevistado cuya respuesta fue: “USFWS los procesará penalmente. Y los violadores anteriores han ido a prisión. Pero no supo decir en qué ocasiones.
John B. Mennell insistió que en estos casos la investigación es con USFWS, pero a pesar de ello no hay ninguna declaración de esa agencia ni ningún contacto de referencia”.
Cuestionado si al conductor que transportaba la totoaba se le retiró el permiso de ingreso de mercancías como chofer comercial a los Estados Unidos Mennel reconoció: “No tengo esa información”, a pesar de que esos datos los debería tener su agencia la CBP.
