La excandidata a gobernadora acusó sin fundamento a Richer de facilitar el conteo de 300,000 boletas “ilegales o inválidas”. Foto: Cortesía / Facebook Kari Lake
Tras una intensa batalla legal, Kari Lake, ex candidata republicana al gobierno de Arizona, alcanzó un acuerdo confidencial con Stephen Richer, registrador del Condado de Maricopa, en una demanda por difamación relacionada con afirmaciones falsas de Lake de que Richer ayudó a manipular las elecciones de 2022 en su contra.
Lake, una figura prominente en la difusión de teorías de conspiración sobre elecciones en Estados Unidos, acusó sin fundamento a Richer de facilitar el conteo de 300,000 boletas “ilegales o inválidas” durante los comicios en los que perdió ante la demócrata Katie Hobbs por más de 17,000 votos. Estas declaraciones no solo avivaron su narrativa sobre un fraude inexistente, sino que, según Richer, provocaron amenazas de violencia hacia él y su familia, obligándolos a instalar medidas de seguridad adicionales en su hogar.
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Richer, quien presentó la demanda en junio de 2023, buscaba compensación por los costos de seguridad, daños a su reputación y salud mental, y una admisión pública de Lake de que sus afirmaciones eran falsas. Aunque en diciembre de 2023 Lake intentó desestimar el caso argumentando que sus declaraciones eran “hipérboles retóricas”, un juez permitió que el caso avanzara. En marzo, Lake legalmente reconoció que sus afirmaciones eran falsas, pero continuó reiterándolas públicamente.
Largo proceso judicial
El litigio estuvo marcado por conflictos prolongados sobre la entrega de pruebas. Lake afirmó que los correos electrónicos de su campaña se habían “eliminado” tras la disolución de su organización, mientras que Richer fue acusado por el equipo legal de Lake de eliminar publicaciones relevantes al caso en su cuenta de X (antes Twitter). Sin embargo, Richer reactivó su cuenta pocos días después, refutando las acusaciones.
El acuerdo se alcanzó días antes de que Lake enfrentara un plazo judicial para proporcionar una declaración jurada detallando cuándo y cómo se eliminaron los correos electrónicos de su campaña. Las condiciones del acuerdo permanecen confidenciales, pero un portavoz del equipo legal de Richer confirmó que se resolvió “a satisfacción de ambas partes”.
Lake, respaldada por el expresidente Donald Trump en su fallida candidatura para gobernadora y actualmente candidata al Senado, sigue siendo una voz prominente en las teorías de conspiración electoral. Aunque recientemente perdió la carrera para el Senado contra el demócrata Ruben Gallego por más de 79,000 votos, aún no ha concedido formalmente las elecciones para gobernadora de 2022.
La controversia también resalta las divisiones internas en el Partido Republicano de Arizona. Richer, quien fue elegido registrador en 2020, perdió su intento de reelección en las primarias republicanas de 2024 ante Justin Heap, un legislador que apoyó medidas basadas en teorías de conspiración electoral promovidas por Lake.
Este caso subraya las consecuencias legales de difundir información falsa, especialmente en un clima político donde las teorías de conspiración han generado amenazas reales contra funcionarios electorales.