Trump en la mira de la justicia

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El cerco parecer irse cerrando en torno Donald Trump, luego que las investigaciones y los procesos en contra del expresidente han ido en aumento, exponiendo una serie de supuestas ilegalidades, desde la evasión de impuestos, el haber incitado la insurrección, intentar revertir el resultado electoral del 2020 y haber sustraído y desechado ilegalmente información confidencial.

El allanamiento del FBI en la residencia del expresidente Donald Trump en Florida supuso una extraordinaria escalada de una investigación sobre el manejo de ciertos documentos de su presidencia y plantea preguntas sobre si su exposición legal se extiende más allá de si tomó indebidamente registros del gobierno cuando dejó la Casa Blanca.

Fiel a su estilo, Trump continúo con su argumento de que todo se trata de una “cacería de brujas”, mientras que sus fanáticos acusaron que luego “vendrían por todos” y serían víctimas de persecución y que sólo se trataba de sacarlo de una potencial candidatura en el año 2024. 

El allanamiento se produce en un momento en que Trump está preparando su candidatura presidencial 2024, y mientras un comité selecto mediante entrevistas de muchos de sus colegas republicanos, intenta probar los intentos del expresidente por anular la elección 2020 por todos los medios posibles, incluida la insurrección.

Todavía se desconoce qué buscaba exactamente el FBI y por qué, pero para obtener una orden de registro, los investigadores tendrían que haber demostrado a un juez que había causa probable de un delito y que las pruebas se encontraban en Mar-a-Lago, el complejo turístico de Trump en Palm Beach, Florida.

Pero antes de que los fiscales llegaran al punto de pedir a un juez magistrado que aprobara la orden, para seguir adelante con un registro habrían tenido que obtener el visto bueno de los más altos niveles del Departamento de Justicia, como mínimo, la fiscal general adjunta, Lisa Monaco, el secretario de Justicia, Merrick Garland y el director del FBI, Chris Wray, tuvieron que dar luz verde.

una orden de allanamiento y la presencia del FBI significan una investigación penal. Hay otros estatutos de retención de registros que conllevan sanciones penales, como la Ley de Espionaje, pero en este momento no está claro qué está implicado en la investigación del Departamento de Justicia.

Pero un hecho es que si es un delito destruir o eliminar registros federales, o manipular indebidamente documentos clasificados, como se acusa a Trump.

Las investigaciones en curso

Los fiscales en Georgia están investigando los esfuerzos de Trump y sus aliados para anular su derrota electoral de 2020 allí, incluida una llamada telefónica en la que pidió al secretario de estado de Georgia, Brad Raffensperger, que le “encontrara” 11,780 votos para revertir el resultado.

El Departamento de Justicia también está interrogando a testigos ante un gran jurado sobre los esfuerzos de Trump para revertir su derrota electoral y los fiscales federales están examinando el plan de sus aliados de presentar electores falsos de estados clave para interrumpir la certificación de la victoria de Biden.

El Comité Selecto del Congreso de los Estados Unidos en sus recientes audiencias y mediante cientos de entrevistas a funcionarios republicanos ha intentado probar que Donald Trump incitó a sus fanáticos a realizar el asalto al Capitolio e impedir la ceremonia de certificación oficial de la victoria de Joe Biden; la insurrección dejó 7 muertos, decenas de heridos y cientos de detenidos.

Trump enfrenta algunas otras investigaciones, algunas de las cuales podrían resultar en sanciones civiles pero no penales. La principal excepción es una investigación criminal sobre su negocio por parte del fiscal de distrito de Manhattan, aunque eso parece haberse desmoronado.

En un interrogatorio bajo juramento por parte de la oficina del fiscal general de Nueva York, que está investigando sus prácticas comerciales, Trump se acogió a la quinta enmienda y declinó responder cualquier pregunta.

Lo último

Antes de la redada, a los funcionarios del Departamento de Justicia les preocupaba que Trump se hubiera quedado con algunos documentos, a pesar de haber devuelto otros.

Si es declarado culpable ¿Se le podría prohibir a Trump ocupar el cargo? Una ley relevante no está probada.

El Departamento de Justicia no notificó con anticipación a la Casa Blanca sobre la búsqueda, dijo el secretario de prensa del presidente Biden.

El representante Scott Perry, un republicano de Pensilvania que presionó para anular la derrota de Trump, dijo que el F.B.I. había incautado su teléfono celular.

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