El presidente Joe Biden visitó el sitio de una nueva planta de chips de computadora en Phoenix como una oportunidad para enfatizar cómo sus políticas están fomentando el crecimiento del empleo y la economía y representa un prometedor futuro para Arizona, que se está convirtiendo en la meca tecnológica del país.
Biden ha apostado su legado en gran parte a importantes inversiones en tecnología e infraestructura que fueron aprobadas por el Congreso en líneas bipartidistas y sostiene que los empleos en las fábricas fomentados por $52 mil millones en inversiones en semiconductores y otros $200 mil millones para investigación científica ayudarán a revivir a la clase media estadounidense.
“Lo que más me emociona es que las personas comienzan a sentir optimismo al ver el impacto de los logros en sus propias vidas. Va a acelerarse en los próximos meses y es parte de una amplia historia sobre la economía que estamos construyendo que funciona para todos”, dijo Biden durante su visita a Phoenix.
El presidente recorrió la planta de Phoenix que está siendo completada por Taiwan Semiconductor Manufacturing Co. que se anunció en 2020 durante la presidencia de Donald Trump.
TSMC también anunció que invertirá un total de $40 mil millones en Arizona, con planes para construir una segunda planta; los funcionarios de la administración de Biden dijeron que las dos plantas de TSMC, así como las nuevas fábricas de Intel, Micron, Wolfspeed y otras, podrían dar una ventaja decisiva al ejército y la economía estadounidenses en un momento en que la competencia con China se está intensificando.
La empresa de chips de computadora Intel también ha invertido en Arizona, que se ha convertido en un microcosmos de las divisiones políticas más amplias de la nación.
Biden utiliza sus visitas a las plantas de chips para hablar sobre los trabajos que espera que lleguen a esas regiones, un proceso que podría tardar una década o más en dar sus frutos y además, las empresas podrían enfrentar el desafío de encontrar trabajadores educados para trabajos con ingresos promedio de más de $100,000 al año, según cifras del Departamento de Trabajo.
El gobernador Doug Ducey, asistió al evento, al igual que su sucesora demócrata recién elegida, Katie Hobbs, actual secretaria de estado de Arizona; igualmente la alcaldesa de Phoenix, Kate Gallego y otros funcionarios; también asistieron el CEO de Apple, Tim Cook, el fundador de TSMC, Morris Chang, el CEO de Micron, Sanjay Mehrotra, y el CEO de Nvidia, Jensen Huang.
Los momentos pasados de bipartidismo en asuntos económicos pueden ser más difíciles después de las elecciones de mitad de período de noviembre, en las que los republicanos obtuvieron la mayoría en la Cámara de Representantes.
El presidente está luchando contra la alta inflación que ha dejado a la mayoría de los estadounidenses con la sensación de que las perspectivas económicas del país son sombrías y ha proporcionado a los republicanos un objetivo para decir que Biden no está satisfaciendo las necesidades de las familias estadounidenses.
Buenas reacciones
“Es un día especial para ver cómo toma forma esta visión”, “Cuando TSMC se dispuso a construir su nueva fábrica de alta tecnología, tenían los 50 estados para elegir. Eligieron Arizona debido a nuestro grupo de talentos sólido y en crecimiento, el entorno empresarial inigualable y la calidad de vida inigualable. A medida que la industria de semiconductores de EE. UU. siga avanzando en los próximos años, Arizona será el motor que impulsará su crecimiento” dijo el gobernador Ducey.
“El presidente Biden no podría haberlo dicho mejor: Arizona está a la vanguardia de las innovaciones en investigación y tecnología. La visita de hoy demuestra que el excepcional grupo de talentos y el entorno comercial de nuestro estado nos convierten en líderes en traer de vuelta la fabricación de semiconductores a Estados Unidos. Espero trabajar con el presidente a lo largo de mi administración para continuar brindando empleos bien remunerados a Arizona, combatiendo la inflación y asegurando nuestra frontera para proteger a nuestras familias”, dijo la gobernadora electa Katie Hobbs.
“Puedo resumir el efecto en la comunidad en una sola palabra, y esa palabra es ‘trabajos’: TSMC ya emplea a cerca de 10,000 trabajadores de la construcción, casi 4500 personas trabajarán en la fábrica una vez que esté en línea y más de 40 de los proveedores de la compañía que también quieren ubicarse en Phoenix. En total, esperamos que este ecosistema cree hasta 80,000 puestos de trabajo en los próximos cinco años, y gran parte de esa demanda será satisfecha por el talento local de Phoenix”, dijo la alcaldesa de Phoenix, Kate Gallego.
