Demandan republicanos a Hobbs

Comparte este Articulo:

Image

Tras constante obstaculización, Gobernadora designa “subdirectores” de agencias

El encono en el gobierno estatal llegó a un nuevo límite luego que el presidente del Senado, Warren Petersen, presentó una demanda de acción especial contra la gobernadora Katie Hobbs, acusándola de violar la ley estatal al eludir las audiencias legislativas para sus designados y pidiendo al Tribunal Superior del Condado de Maricopa que restableciera la práctica de exigir la aprobación del Senado para los nominados.

“Si bien la Gobernadora tiene discreción para seleccionar al candidato de su elección, su deber legal de hacer una nominación con prontitud y transmitirla al Presidente del Senado es obligatorio y no discrecional”, escribió Petersen en un comunicado.

Y es que el proceso de aprobación de los jefes de agencias ha sido un punto de particular controversia durante el primer año de Hobbs como gobernadora, pues ha enfrentado serios obstáculos por parte de la comisión creada ex profeso por los republicanos.

La ley de Arizona exige que el director ejecutivo nomine candidatos para dirigir las agencias estatales y esos candidatos conforman el gabinete del gobernador y son elegidos cuidadosamente con miras a llevar a cabo su visión para el estado, sin embargo, antes de que puedan ser considerados directores legales de agencias estatales, los candidatos deben ser considerados y aprobados por el Senado estatal.

En años anteriores, las confirmaciones del Senado se produjeron con poca fanfarria, tras breves entrevistas con los comités legislativos pertinentes; el candidato para el Departamento de Servicios de Salud de Arizona se reuniría con el Comité Senatorial de Salud y Servicios Humanos, por ejemplo. 

Pero este año, con la legislatura de mayoría republicana en desacuerdo con Hobbs, el Senado estatal formó un comité específico para examinar y entrevistar a los nominados y rechazó a una gran parte de ellos.

El Comité de Nominaciones a Directores, encabezado por el senador Jake Hoffman, un republicano de Queen Creek que también encabeza el recién creado grupo de extrema derecha Arizona Freedom Caucus, convirtió un proceso que alguna vez fue simple en uno que reflejaba los interrogatorios de horas de duración realizados a nivel federal. 

De las 13 nominaciones presentadas por Hobbs, 10 fueron entrevistadas y finalmente sólo siete fueron recomendadas para su confirmación por el pleno del Senado y más de uno fue despedido por motivos ideológicos.

La Dra. Theresa Cullen, elegida por Hobbs para dirigir el departamento de salud estatal, fue rechazada después de una audiencia enconada que incluyó acusaciones de que su decisión como directora de salud pública del condado de Pima de cerrar las escuelas al principio de la pandemia resultó en un aumento de la depresión y el suicidio entre los estudiantes. 

Y la nominación de Elizabeth Alvarado-Thorson a la dirección del Departamento de Administración de Arizona, que supervisa el seguro médico financiado por el estado, fue congelada después de que los republicanos la interrogaran sobre sus creencias personales sobre el aborto, a pesar de que su deber sería implementar estrictamente leyes y políticas estatales y no crearlas.

Con numerosos candidatos pendientes de entrevista y frustrada con el proceso, Hobbs retiró su lista de nominaciones pendientes en septiembre y los reasignó como subdirectores ejecutivos, evitando efectivamente la necesidad de confirmaciones del Senado. 

Y para lograrlo, Hobbs elevó a su director de operaciones, Ben Henderson, al puesto de director interino de 13 agencias, una tras otra, entonces durante su mandato, que en ocasiones no duró más de una hora, Henderson nombró rápidamente a cada uno de los elegidos por Hobbs como subdirectores ejecutivos de sus respectivas agencias y luego renunció.

La ley estatal permite al gobernador asignar subdirectores en lugar de directores interinos cuando la legislatura está fuera de sesión o no actúa sobre las nominaciones. 

Mientras tanto, las vacantes deben ser cubiertas y presentadas para la aprobación del Senado por el gobernador, ya sea de inmediato si la legislatura está en sesión o dentro de la primera semana de la siguiente sesión y nadie puede ejercer el cargo de director por más de un año sin confirmación.

Lo consideran ilegal

La decisión de Hobbs de eludir la investigación de antecedentes de los legisladores constituyó una acción ilegal, según Petersen.

“Al negarse a nominar directores de agencias y eludir los procesos de asesoramiento y consentimiento del Senado, la Gobernadora ha violado una directiva estatutaria vinculante, ha actuado en exceso de su autoridad legal y no ha cumplido con un deber no discrecional”, escribieron los abogados de Petersen.

Si bien los subdirectores ejecutivos no son técnicamente jefes de agencias, sino que ocupan un puesto de director vacante, no es la primera vez en la historia de Arizona que las agencias estatales han sido dirigidas por directores en todo menos en el nombre. 

En 1991, el gobernador republicano Fife Symington empleó una táctica similar cuando el Senado controlado por los demócratas se negó a confirmar su elección para el Departamento de Administración, instalando su elección como subdirector y dejando vacío el primer puesto.

Y a menos que el tribunal esté de acuerdo con Petersen o que el Senado estatal haga cambios, parece que el puesto más alto de al menos 13 agencias estatales seguirá vacante, y el liderazgo de esas agencias se concentrará en los puestos del segundo al mando.

A pesar de dos meses de discusiones, dijo Petersen en su demanda, Hobbs se ha mantenido firme en su compromiso de no presentar más candidatos para que el Senado los entreviste a menos que se modifique el proceso de confirmación. 

Petersen instó al tribunal a determinar que los nombramientos de Hobbs violan la ley estatal, declarar que condicionar futuras nominaciones a cambios en el proceso de confirmación del Senado es ilegal y ordenar que Hobbs regrese al proceso de nominación tradicional y también solicitó que se exija al gobernador el pago de los honorarios de su abogado.

En una declaración escrita, Hoffman criticó la decisión de Hobbs de eludir las audiencias de confirmación del Senado por “obligar a las agencias a operar ilegalmente”. 

El republicano de Queen Creek denunció su falta de voluntad para trabajar con los republicanos y dijo que eso sólo serviría para perjudicar a los arizonenses comunes y corrientes.

“Ha dejado muy claro a los votantes que a los demócratas les importa más jugar juegos políticos petulantes y hacer berrinches que gobernar. Los republicanos, por otro lado, están comprometidos a crear un gobierno que funcione para todos los arizonenses”, dijo en un comunicado enviado por correo electrónico. 

Sin más alternativas

Christian Slater, portavoz de Hobbs, respondió que a la gobernadora no le quedó otra opción después de que los republicanos obstaculizaran continuamente a sus nominados.

“Después de que Jake Hoffman y el Senado se negaran a hacer su trabajo de manera significativa, la gobernadora Hobbs tomó medidas legales para cumplir con sus deberes y garantizar que los arizonenses puedan seguir dependiendo de los servicios críticos de las agencias estatales”, dijo. 

“Ella está lista para trabajar con cualquiera en el Senado que realmente quiera dejar de lado los juegos políticos y cumplir con los arizonenses comunes y corrientes, y como ha dicho desde el primer día, permanece abierta a un proceso justo y oportuno para la confirmación de los nominados”, finalizó.

Mantente Conectado

Ultimos Post

Categorias

Podcast


Acompañanos en nuestro Podcast

podcast

Comparte este Articulo: