El aumento en el gasto externo refleja la competitividad de estas elecciones y el potencial que tienen para cambiar el control de la legislatura estatal. CORTESIA: Arizona Legislature / Facebook
En un movimiento que subraya la importancia de las elecciones legislativas en Arizona, el Comité de Campaña Legislativa Demócrata (DLCC, por sus siglas en inglés) anunció que invertirá cerca de un millón de dólares en carreras clave en todo el estado. Esta cifra se suma a los 8.5 millones de dólares que grupos externos ya han destinado a una serie de distritos estratégicos.
La inversión del DLCC forma parte de una compra publicitaria mayor de 2 millones de dólares, dividida entre Arizona y Pensilvania, con el objetivo de cambiar el control de ambas cámaras legislativas a manos demócratas por primera vez en casi 60 años.
Este esfuerzo financiero llega en un momento crítico, con los demócratas destacando los derechos reproductivos como tema central de su campaña, especialmente con una enmienda constitucional sobre derechos reproductivos que aparecerá en la boleta electoral de Arizona en noviembre. La directora de comunicaciones del DLCC, Sam Paisley, señaló que el control de las legislaturas de Arizona y Pensilvania dependerá de un pequeño número de votos, con el tema del aborto jugando un papel crucial en la decisión de los electores.
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Ventaja demócrata en gastos externos
Un análisis periodístico sobre los datos de gastos independientes muestra que la inyección de fondos externos ha otorgado una ligera ventaja a los demócratas en los distritos más competitivos. En las 11 carreras clave examinadas, los gastos independientes a favor de los demócratas sumaron aproximadamente 4.67 millones de dólares, mientras que los esfuerzos a favor de los republicanos alcanzaron los 3.87 millones de dólares.
Este apoyo financiero externo ha superado significativamente las capacidades de recaudación de fondos de los propios candidatos. En la disputada carrera por la Cámara en el Distrito Legislativo 13, con sede en Chandler, los grupos externos han gastado más de 1.6 millones de dólares, superando con creces los 826,310 dólares combinados que han recaudado los cuatro candidatos: los demócratas Nicholas Gonzales y Brandy Reese, y los republicanos Jeff Weninger y Julie Willoughby.
De manera similar, en la carrera por el Senado en el Distrito 2, que abarca gran parte del norte de Phoenix, los gastos externos han alcanzado casi 1.42 millones de dólares, superando los 841,000 dólares recaudados por la senadora republicana Shawnna Bolick y su oponente demócrata, la representante Judy Schwiebert.
Los grupos detrás del financiamiento
Entre los principales grupos que están financiando estas campañas se encuentran Future Freedoms, que ha destinado 2.3 millones de dólares en apoyo a los demócratas, y Responsible Leadership for AZ, con 1.5 millones en respaldo a los republicanos. Otros grupos clave incluyen House Victory Fund y Arizona Senate Victory Fund PAC, ambos apoyando a los republicanos, y Stand For Children Arizona, que ha invertido 1.1 millones de dólares en favor de los demócratas.
El aumento en el gasto externo refleja la competitividad de estas elecciones y el potencial que tienen para cambiar el control de la legislatura estatal. El entusiasmo entre los demócratas es palpable después de los éxitos obtenidos en las elecciones de 2022, donde el partido ganó todos los cargos estatales clave, incluida la gobernación. Ahora, los demócratas buscan asegurar mayorías legislativas que le permitan a la gobernadora Katie Hobbs implementar su agenda.
Por su parte, los republicanos, aunque superados en gasto, han encontrado algunas victorias en las primarias, como la de Vince Leach en el distrito de Tucson, donde venció a la senadora Justine Wadsack, lo que ha renovado la confianza del partido en mantener ese escaño.
A medida que se intensifica la campaña para las elecciones generales, ambos partidos están marcando claramente los contrastes. Los demócratas acusan a sus oponentes de ser extremistas alineados con la agenda MAGA, mientras que los republicanos describen a los demócratas como socialistas radicales.
Con millones en juego y más dinero en camino, los votantes de Arizona se enfrentarán a una avalancha de mensajes en las próximas semanas mientras ambas partes luchan por el control de la legislatura estatal en lo que promete ser una de las elecciones más reñidas y costosas de la historia de Arizona.