Dos departamentos de policía del norte de Arizona recibirán una inyección de fondos combinados de $1.5 millones para combatir el fentanilo y el contrabando de personas en sus comunidades.
La gobernadora Katie Hobbs anunció que la Oficina del Sheriff del Condado de Yavapai y el Departamento de Policía de Prescott Valley recibirán cada uno aumentos de fondos de más de $500,000, y YCSO se quedará con la mayor parte del dinero de la subvención, para reforzar la dotación de personal y las iniciativas locales contra el crimen.
“Ya sea por la falta de oficiales en el campo o por tecnología obsoleta, nuestros condados no han recibido las herramientas que necesitan para tener éxito. Pero eso termina ahora”, dijo Hobbs.
Los recursos son la acción más reciente de la Gobernadora para abordar la seguridad fronteriza, un área política en la que la demócrata ha buscado contrastar su enfoque de soluciones locales con las propuestas de su predecesor que terminaron siendo noticias nacionales.
A principios de junio, el gobierno del estado asignó $ 25 millones a tres comunidades fronterizas del Fondo de Seguridad Fronteriza del ex gobernador Doug Ducey, que se movilizó previamente para pagar cosas como un muro fronterizo hecho de contenedores de envío, algo que Hobbs ridiculizó como “trucos políticos”.
“Anteriormente, este tipo de financiamiento se usaba para trucos políticos que no ayudaban de manera efectiva a las fuerzas del orden público a hacer su trabajo”, dijo.
“Bajo mi administración, trabajando en estrecha colaboración con las ciudades y los condados, continuaremos evaluando e identificando cuidadosamente las necesidades específicas de cada área y adaptando el apoyo a esas necesidades”, señaló.
Ha surgido una preocupación renovada con la seguridad fronteriza antes de la temporada de campaña de 2024 y luego de la reciente expiración del Título 42, una política de salud pública de la era Trump que permitió a los funcionarios de inmigración eludir los procesos de asilo y expulsar rápidamente a más de 2 millones de personas.
A los funcionarios estatales y federales les preocupaba que el fin de la política condujera a un aumento sin precedentes de inmigrantes en las regiones fronterizas, pero ese aumento no se ha visto materializado.
El dinero de las subvenciones de Hobbs, dijeron los funcionarios locales encargados de hacer cumplir la ley, se destinará a cerrar las brechas de personal y reforzar los esfuerzos de un grupo de trabajo de narcóticos y contrabando que opera en todo el condado.
El Departamento de Policía de Prescott Valley ayuda a administrar Partners Against Narcotics Trafficking, o PANT, que realiza investigaciones encubiertas, detenciones de narcóticos en las carreteras y alcance comunitario.
El jefe de policía de Prescott Valley, Bob Ticer, elogió las subvenciones de Hobbs y señaló que los fondos son un apoyo fundamental en una comunidad con pocos dólares para repartir.
“Hay tantos fondos que circulan a nivel local, obtener el apoyo del estado y poder ayudar a combatir este tipo de crimen es realmente primordial y estamos muy agradecidos por eso”, dijo.
Las sobredosis de fentanilo se han disparado en el condado de Yavapai. El área rural experimentó solo 9 muertes relacionadas con el fentanilo en 2019, pero ese número aumentó a 40 en 2020, y en 2022 PANT confiscó más de un millón de pastillas de fentanilo, según el alguacil del condado de Yavapai, David Rhodes.
El Sheriff atribuye ese aumento a un aumento en las operaciones de contrabando transfronterizo.
“Estamos lidiando con cosas que realmente no hemos visto y creo que es importante tener en cuenta que las fuerzas del orden locales, la policía comunitaria, no fueron creadas para lidiar con el tipo de organizaciones transnacionales multimillonarias que alimentan este aumento en nuestras comunidades”, dijo.
Hobbs estuvo de acuerdo y dijo que la actividad criminal en la región fronteriza del estado no permanece aislada en esa área. La nueva financiación, dijo, está destinada a abordar las consecuencias que deben enfrentar las comunidades más arriba en el estado.
“Sabemos que los delitos que ocurren en la frontera sur no se quedan ahí”, dijo. “Es importante que todos los condados estén bien equipados para evitar que las actividades dañinas lleguen a su comunidad”.
Los ciudadanos introducen de contrabando la gran mayoría del fentanilo en los Esttados Unodos a través de los puertos de entrada oficiales, y Hobbs señaló que su administración se centra tanto en mejorar la seguridad portuaria como en detener la actividad que se adentra más en el estado.
El 27 de junio, Hobbs y el senador estadounidense Mark Kelly asistieron a la inauguración del puerto de entrada terrestre de San Luis, en el que se realizaron mejoras de infraestructura y seguridad facilitadas por fondos federales.
