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Donald Trump dijo a un tribunal de apelaciones el lunes que no puede obtener una fianza por el monto total de la sentencia por fraude civil en su contra (más de 450 millones de dólares, incluidos intereses), lo que plantea la posibilidad de que la oficina del fiscal general del estado pueda comenzar a embargar su activos a menos que el tribunal acuerde suspender la sentencia mientras el ex presidente apela el veredicto.
Los abogados de Trump dijeron en un expediente judicial que “los esfuerzos diligentes en curso han demostrado que una fianza por el monto total de la sentencia es una ‘imposibilidad práctica'”, y agregaron que esos esfuerzos “han incluido acercarse a unas 30 compañías de garantía a través de cuatro corredores separados”.
Cuando un demandado apela una sentencia civil, el demandado puede impedir los esfuerzos de cobro mientras avanza la apelación, ya sea depositando el monto total en un fondo de garantía o asegurando una fianza de un tercero para garantizar el monto total.
La fecha límite de Trump para hacerlo es el 25 de marzo, a menos que el tribunal de apelaciones acuerde suspender la sentencia o permitirle pagar una fianza por una cantidad menor.
Trump había dicho previamente a la corte de apelaciones que no tiene el dinero para impedir la ejecución de la sentencia.
A fines del mes pasado, un juez de la corte de apelaciones denegó la solicitud de Trump de suspender la ejecución de la sentencia por fraude comercial generalizado. Un panel completo de la corte de apelaciones de Nueva York, conocido como el Primer Departamento de la División de Apelaciones, está considerando ahora si suspender el fallo mientras Trump continúa con su apelación.
