El control de la política local sigue en el aire mientras continúa el conteo de votos. Foto: Cortesía / Facebook Stephanie Greene-Hunley
A pesar de un gasto electoral sin precedentes, los primeros resultados no auguran el cambio deseado por los demócratas en la Legislatura de Arizona.
Los demócratas de Arizona realizaron una inversión histórica en su intento por arrebatar el control legislativo a los republicanos, quienes han mantenido la mayoría en el Congreso estatal desde mediados de los años 60.
Sin embargo, los resultados iniciales de las elecciones, aunque parciales, indican que estos esfuerzos no lograron persuadir a suficientes votantes en los distritos clave para inclinar el poder en el Capitolio a su favor.
El cierre de la edición, los demócratas parecían estar en posición de dividir el Senado estatal de 30 escaños con los republicanos, mientras que el Partido Republicano mantenía una ajustada mayoría en la Cámara de Representantes, no obstante, el resultado final sigue siendo incierto, ya que los funcionarios electorales del condado continúan contando votos durante la noche y el resto de la semana.
Viendo esta elección como su mejor oportunidad en décadas, los demócratas invirtieron más de $10 millones en un puñado de contiendas en zonas estratégicas, principalmente en suburbios de Phoenix y Tucson. Los republicanos, por su parte, respondieron con una cifra cercana a los $7.4 millones para proteger sus escasas mayorías en cada cámara. La mayor parte de este gasto electoral se concentró en 13 distritos, y cinco de ellos acapararon casi $10 millones del total.
El Distrito 13, ubicado en Chandler, ha sido el escenario de una de las contiendas más costosas para la Cámara de Representantes. En esta región, los grupos externos invirtieron alrededor de $2.43 millones, con más de $1.5 millones destinados a respaldar a los candidatos demócratas Brandy Reese y Nicholas Gonzales.
En comparación, $880,000 fueron destinados a promover a la republicana Julie Willoughby y al exlegislador republicano Jeff Weninger. Con el 91% de los distritos reportados, la diferencia entre los cuatro candidatos es de menos de 1,000 votos. Reese lideraba el grupo, seguida muy de cerca por Weninger y Willoughby, con Gonzales en cuarto lugar.
Otra batalla crucial se desarrolla en el Distrito 2, en el norte de Phoenix, donde el escaño del Senado estatal enfrenta a la demócrata Judy Schwiebert y a la republicana Shawnna Bolick. Con un gasto externo de $2.35 millones, más de $1.3 millones fueron destinados a apoyar a Schwiebert, mientras que aproximadamente $1 millón fue para Bolick. Schwiebert tomó la delantera en los primeros resultados de voto anticipado, pero Bolick la superó cuando se contaron los votos emitidos el día de la elección. Al momento, Bolick tiene una ventaja de apenas 180 votos.
En el sur de Arizona, los demócratas están a punto de capturar un escaño en el Senado en el Distrito Legislativo 17, tradicionalmente republicano. John McLean, un exmiembro del Partido Republicano, tiene una ventaja de casi 5,000 votos sobre el exlegislador republicano Vince Leach, lo que podría representar una significativa ganancia para los demócratas en esta área suburbana de Tucson.
Los probables escenarios
En otras contiendas del Senado, los resultados preliminares indican una posible estabilidad en el estado actual de los escaños, con las demócratas Christine Marsh y Eva Burch defendiendo sus puestos ante desafíos republicanos. Por otro lado, los senadores republicanos J.D. Mesnard y T.J. Shope parecen mantener sus escaños, aunque la contienda de Mesnard es particularmente reñida, con una ventaja de apenas 950 votos sobre la demócrata Sharon Winters.
En la Cámara de Representantes, se anticipa un intercambio de escaños entre republicanos y demócratas en distritos vecinos. En el Distrito 16, el titular demócrata Keith Seaman va detrás del republicano Chris Lopez por casi 700 votos. Mientras tanto, en el Distrito 17, el novato demócrata Kevin Volk parece estar en camino de reemplazar al republicano Cory McGarr, quien se encuentra en tercer lugar, a 1,700 votos de su compañera de partido, Rachel Jones.
Los titulares demócratas Lorena Austin y Seth Blattman en el Distrito Legislativo 9, con sede en Mesa, lideran cómodamente sobre sus oponentes republicanos Kylie Barber y Mary Ann Mendoza. En el Distrito 23, la representante demócrata Michele Pena parece haber defendido su escaño en esta región de gran concentración demócrata que se extiende desde los suburbios del suroeste de Phoenix hasta Yuma.
Aunque los resultados preliminares reflejan un estancamiento en el intento de los demócratas por ganar el control legislativo, el panorama final depende de los votos que aún quedan por contar.
El desenlace de estas elecciones podría redefinir el equilibrio de poder en Arizona, un estado que se ha convertido en un campo de batalla esencial en la política estadounidense.