Karrin Taylor Robson, orgullosamente se postuló y se promociona con el apoyo de Trump, que ahora está dividido también para su contrincante republicano Andy Biggs. Foto: Cortesía / Karrin Taylor Robson
Donald Trump desconcertó al electorado conservador de Arizona al otorgar su respaldo a dos candidatos rivales para la nominación republicana a la gubernatura en 2026: la empresaria Karrin Taylor Robson y el congresista Andy Biggs. La decisión, anunciada en Truth Social, inyectó caos en una contienda clave para desafiar a la gobernadora demócrata Katie Hobbs.
En su publicación, Trump elogió a ambos como “campeones maravillosos” y afirmó que “ninguno los defraudará”. El gesto sorprendió, pues en diciembre había respaldado exclusivamente a Robson, quien perdió las primarias de 2022 contra Kari Lake, también apoyada por Trump.
Pero Andy Biggs, aliado del expresidente desde 2016, anunció su candidatura en enero, complicando el panorama.
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Robson, agradeciendo el apoyo en X (antes Twitter), recordó que Trump la animó a postularse en diciembre. Biggs, por su parte, celebró el respaldo como un “honor” y prometió “luchar junto a él” como gobernador. Ninguna campaña comentó sobre la contradicción de respaldar a dos rivales.
Historial de dobles juegos
No es la primera vez que Trump divide sus apoyos en Arizona, pues en 2024, respaldóprimero a Abe Hamadeh para el Distrito 8 de Arizona, y días antes de las primarias, también a Blake Masters.
Hamadeh ganó la nominación y el escaño, pero el episodio reveló la volatilidad de los avales trumpistas.
Analistas señalan que la estrategia busca mantener influencia sobre la base maga sin alienar a ningún sector. “Trump prioriza lealtad sobre coherencia. Esto debilita a ambos candidatos”, comentó un experto local bajo anonimato.
El doble respaldo de Trump podría diluir el apoyo a ambos candidatos, beneficiando a un tercer contendiente no alineado con el expresidente, sin embargo, la lealtad a Trump sigue siendo un factor decisivo en las primarias de Arizona, donde el 68% de votantes republicanos lo respaldan, según tendencias históricas.
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Para Robson, el desafío es demostrar que su apoyo inicial de Trump no fue un mero formalismo y para Biggs, es consolidarse como el “verdadero MAGA” frente a una rival que ya carga con una derrota primaria.
Mientras tanto, Hobbs consolida su imagen como gobernadora pragmática, vetando leyes republicanas controvertidas y enfocándose en temas como educación y acceso al agua. Su campaña, aunque anticipa una batalla dura, observa con atención la fragmentación republicana.
