Foto: Kendall Hoopes/Pexels
Un conductor provocó una masacre en el famoso Barrio Francés de Nueva Orleans la madrugada del día de Año Nuevo, matando a 10 personas al embestir con su camioneta a una multitud antes de ser abatido a tiros por la policía, dijeron las autoridades.
Más de 30 personas resultaron heridas cuando el ataque del miércoles convirtió la festiva Bourbon Street en un caos macabro. El FBI lo está investigando como un acto de terrorismo y dijo que no cree que el conductor haya actuado solo. Una bandera del grupo Estado Islámico fue encontrada en el enganche del remolque del vehículo, dijo el FBI.
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Los investigadores también encontraron armas y bombas caseras, que estaban ocultas dentro de hieleras, según un boletín de inteligencia de la Policía Estatal de Luisiana obtenido por The Associated Press. Ambos dispositivos estaban cableados para detonación remota, y se descubrió un control remoto correspondiente dentro de la camioneta del sospechoso, dijo el boletín.
El ataque provocó el aplazamiento hasta el jueves de los cuartos de final de los playoffs de fútbol universitario en el cercano Superdome.
El FBI identificó al conductor como Shamsud-Din Jabbar, de 42 años, ciudadano estadounidense de Texas y dijo que está trabajando para determinar las posibles asociaciones y afiliaciones de Jabbar con organizaciones terroristas.
“No creemos que Jabbar fuera el único responsable”, dijo Alethea Duncan, agente especial asistente a cargo de la oficina de campo del FBI en Nueva Orleans, en una conferencia de prensa.
Jabbar fue asesinado por la policía después de que saliera del vehículo y abriera fuego contra los agentes, dijo la policía. Dos agentes recibieron disparos y se encuentran en condición estable, dijo la policía. Se sumaron a las 33 personas heridas en el ataque al vehículo.
Una foto que circuló entre los funcionarios encargados de hacer cumplir la ley mostraba a un Jabbar barbudo con ropa de camuflaje junto al camión después de que lo mataran. El ataque ocurrió alrededor de las 3:15 a.m. en un área repleta de personas que celebraban el Año Nuevo.
Los investigadores recuperaron una pistola y un rifle tipo AR después del tiroteo, dijo un funcionario de la policía. El funcionario no estaba autorizado a discutir los detalles de la investigación públicamente y habló bajo condición de anonimato.
El FBI dijo que un posible dispositivo explosivo improvisado fue localizado en el vehículo y otros posibles dispositivos explosivos también fueron localizados en el Barrio Francés.
La alcaldesa de Nueva Orleans, LaToya Cantrell, describió los asesinatos como un “ataque terrorista”.
La superintendente de policía de Nueva Orleans, Anne Kirkpatrick, dijo que el conductor estaba “empecinado en crear la carnicería y el daño que causó”.
“Fue un comportamiento muy intencional. Este hombre estaba tratando de atropellar a tantas personas como pudiera”, dijo Kirkpatrick.
La concejal de la ciudad de Nueva Orleans, Helena Moreno, dijo a WWL-TV que después de ser informada sobre el ataque, entiende que “existe la posibilidad de que otros sospechosos puedan estar involucrados en esto y que todos deben participar para determinar quiénes son estos individuos y encontrarlos”.
La zona es un destino privilegiado para la Nochevieja, y decenas de miles de aficionados al fútbol universitario estaban en la ciudad para el partido Sugar Bowl entre Georgia y Notre Dame, que originalmente estaba programado para el miércoles por la noche.
“Cuando llegué al trabajo esta mañana, había una especie de caos en todas partes”, dijo a The Associated Press Derick Fleming, botones jefe de un hotel del centro. “Había un par de cuerpos en el suelo cubiertos. La policía estaba buscando bombas en los botes de basura”.
