Casi medio millón de ciudadanos han firmado para que se proteja su derecho al voto, por lo que se considera fundamental que Arizonenses por Elecciones Justas esté en la boleta electoral de noviembre. CORTESIA: Arizonans for Fair Elections / Facebook
Completan la presentación de firmas para la medida electoral en el estado
Los proponentes de una medida electoral que cambiaría radicalmente la forma en que se llevan a cabo las primarias de Arizona entregaron cientos de miles de firmas de votantes, superando significativamente la cantidad necesaria para incluir la propuesta en la boleta electoral de noviembre.
La Ley para Hacer Elecciones Justas propone enmendar la Constitución de Arizona para abrir las primarias a cualquier candidato o votante, independientemente de su afiliación partidista. Actualmente, los votantes no registrados en un partido político deben solicitar una boleta partidista para participar en las primarias de julio, y no pueden votar en las primarias presidenciales sin cambiar su registro partidario.
En abril, casi el 34% de los votantes registrados en el estado no estaban afiliados a ninguno de los partidos principales, mientras que el 35% eran republicanos y el 29% demócratas. Esta medida pretende incluir a este significativo grupo de votantes independientes en las primarias.
El comité bipartidista que impulsó la campaña entregó 584,000 firmas de votantes a la Oficina del Secretario de Estado el último día permitido para hacerlo, superando en 200,000 firmas el mínimo requerido. Ahora, los funcionarios electorales verificarán las firmas para confirmar que se cumpla el umbral de 383,923 firmas válidas.
Los partidarios de la medida argumentan que esta hará que los funcionarios electos respondan a una mayor porción del electorado en lugar del pequeño porcentaje de republicanos y demócratas que actualmente votan en las primarias.
Chuck Coughlin, presidente y director ejecutivo de Highground Public Affairs, calificó la situación actual como “locura” y criticó tanto a republicanos como a demócratas por fallar en la representación democrática. La Ley para Hacer Elecciones Justas busca eliminar el control partidista en las primarias y fomentar elecciones generales más competitivas.
De ser aprobada, la medida permitiría que todos los candidatos participen en una única boleta en las primarias, y los votantes podrían elegir a su favorito sin importar su afiliación partidista. La legislatura y el gobernador determinarían cuántos candidatos avanzarían a las elecciones generales, con un mínimo de dos y un máximo de cinco para cargos individuales como gobernador o fiscal general. Si se eligen más de dos candidatos, el ganador se determinaría mediante votación por orden de preferencia.
En las elecciones para múltiples escaños, como la Cámara de Representantes de Arizona, la legislatura podría permitir que entre cuatro y siete candidatos avancen a las elecciones generales, con la opción de implementar un sistema de votación por orden de preferencia.
El Partido Republicano de Arizona se opone formalmente a la medida, argumentando que causaría “confusión y privación de derechos de los votantes”.